Cocina de Volcanes

Lanzarote

Nuestra historia

La historia culinaria de Lanzarote está profundamente arraigada en las tradiciones de las Islas Canarias y ha sido influenciada por una mezcla de culturas indígenas, africanas, españolas y latinoamericanas a lo largo de los siglos.

El guanche y la carne de cabra

Antes de la llegada de los conquistadores españoles en el siglo XV, los indígenas de las Islas Canarias ya cultivaban productos básicos que se convertirían en pilares de la dieta canaria. Papas, legumbres, cereales y la pesca formaban la base de su alimentación. La introducción de ganado por los españoles también enriqueció la dieta isleña con carne y lácteos.

La influencia africana se nota en el gofio, una harina tostada hecha de cereales como el maíz o el trigo, consumida por los guanches y que sigue siendo un alimento esencial en la gastronomía canaria. La influencia latinoamericana, tras la colonización española, trajo ingredientes como el pimiento, el tomate, la calabaza y el maíz, que se integraron en la cocina canaria.

Sal y Lava

Debido a su ubicación geográfica, la pesca es fundamental en la gastronomía lanzaroteña. Esta tradición se ha transmitido de generación en generación, formando parte integral de la identidad cultural de la isla. Platos tradicionales como el «caldo de pescado» o la «vieja sancochada» reflejan la importancia de la pesca en la alimentación local. Los pescadores locales capturan una amplia variedad de peces y mariscos frescos, asegurando ingredientes de alta calidad para la cocina de Lanzarote.

El impacto de la actividad volcánica también ha influido en la gastronomía local. Las erupciones volcánicas históricas, especialmente las del siglo XVIII, cubrieron grandes áreas de tierra con ceniza volcánica, creando un suelo fértil único conocido como «rofe» o «picón». Este suelo es ideal para el cultivo de viñedos, tomates y otros productos agrícolas, lo que ha contribuido a la diversidad y calidad de los ingredientes locales.